
Saludos, hermanos de todo el mundo:
Hace menos de una semana que terminaron los días de Panes sin Levadura. Parece que han pasado muchas cosas desde entonces. Sin duda, la situación mundial ha dado un giro dramático con la muerte del papa a principios de esta semana.
Cómo manejarnos en esta era de injusticia
Antes de entrar en eso, enfoquémonos primero en los días de Panes sin Levadura. Vivimos en tiempos que pueden considerarse tumultuosos e inciertos, como claramente muestra la economía estadounidense y lo que está sucediendo con las conversaciones sobre aranceles y otros temas que dominan nuestras noticias.
Pero también debemos recordar que estamos viviendo en una época de “injusticia”, como ha quedado más en evidencia en los últimos cuatro años. Sin embargo, aunque parece haber una tendencia (al menos en Estados Unidos) hacia una ideología de ley, orden y “moralidad” tradicionales, sabemos que hay fuerzas que se oponen firmemente a ello.
Si no somos cuidadosos y vigilantes, estas actitudes de “injusticia” pueden apoderarse incluso de los miembros de la Iglesia. No es que ninguno de nosotros tenga la intención de ignorar o hablar en contra de lo que dice la Biblia. Pero nuestras palabras, respaldadas por nuestras acciones, deben reflejar siempre nuestro compromiso con la Biblia y sus principios.
Tal como aprendimos durante los días festivos que acaban de concluir, el claro mensaje que Dios da a su pueblo es que nos examinemos a nosotros mismos, nos arrepintamos y “venzamos” nuestros pecados, nuestro orgullo, nuestra elevada opinión de nosotros mismos, nuestras actitudes erróneas e incluso la actitud de que, solo porque hemos permanecido en la fe durante décadas, ahora somos inmunes a los peligros de la influencia de Satanás y del mundo. “Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga”, nos recuerda Dios en 1 Corintios 10:12.
Los mensajes de Cristo a las siete iglesias en Apocalipsis son muy instructivos. Cada una de las advertencias se aplica a cualquiera de nosotros. A menudo hablamos de la actitud “laodicense”, en la que, debido a las situaciones favorables del mundo y la economía, podemos tener la actitud espiritual descrita en Apocalipsis 3:17: “Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad”.
Pero hay advertencias a las otras iglesias que también debemos tener en cuenta. Por ejemplo, Dios advierte a Éfeso que vuelva a su primer amor. A Pérgamo y a Tiatira, que no se dejen seducir por las doctrinas del mundo y que no sean culpables de inmoralidad sexual. (Por supuesto, Dios se refiere a la prostitución espiritual, de la que podemos ser culpables, como lo han sido tantos de su pueblo a lo largo de los siglos).
Cabe destacar que en Apocalipsis 2:20, al dirigirse a Tiatira, Jesús advierte: “Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que toleras que esa mujer (la traducción correcta es tu mujer) Jezabel . . . enseñe y seduzca a mis siervos . . .”.
En una época en la que la anarquía ha invadido nuestras sociedades, podríamos preguntarnos: ¿“toleramos” las acciones, actitudes, comportamientos y palabras pecaminosas de aquellos que podrían influir en nosotros? ¿Excusamos esas cosas, tal vez en nombre del “amor” en el sentido que el cristianismo del mundo utiliza esa palabra?
¿Los excusamos y toleramos porque es más fácil hacerlo que prestar atención a lo que dijo el apóstol Pablo en 1 Corintios 5? Allí escribió claramente que si realmente amamos (utilizando la definición de Dios de ágape) a nuestro hermano, debemos amonestarlo y corregirlo. No debemos tolerar las acciones pecaminosas continuas y sin arrepentimiento.
Somos la Iglesia de Dios y estamos llamados a vivir según cada palabra de Dios. No olvidemos las lecciones de los Días de Panes sin Levadura. Pongamos la palabra de Dios en nuestra mente cada día, no las actitudes, la tolerancia al pecado y la interpretación del mundo de por qué Cristo dio su vida.
La muerte del papa Francisco y los cambios en el Foro Económico Mundial
En la escena mundial, a principios de esta semana se produjeron algunos acontecimientos importantes. El papa Francisco falleció repentinamente el lunes por la mañana, después de aparecer ante el mundo el día anterior. Su funeral será seguido por muchos este fin de semana, y luego comenzará el proceso para elegir un nuevo papa.
El mismo día de la muerte del papa, el influyente líder del Foro Económico Mundial (FEM), Klaus Schwab, de 87 años, dimitió, abriendo la puerta a un nuevo líder de esa institución, a la que pertenecen tantos líderes mundiales y multimillonarios notables. El FEM se ha comprometido con un mundo de globalización, políticas de cambio climático y la promoción de estilos de vida que difieren drásticamente de lo que ha sido la norma.
Con la vacante de estos dos influyentes cargos, que tendrá repercusiones en todo el mundo, podría ser que la profecía bíblica, que habla del surgimiento del poder de la “bestia” en Europa, esté a punto de dar un gran paso adelante.
Antes de terminar, quiero dar las gracias a Fred y Lidia Nance y a las congregaciones de la zona de Little Rock, Arkansas, por su hospitalidad la semana pasada con motivo del último día de los Panes sin Levadura. Fue maravilloso estar allí con todos ustedes. El pueblo de Dios en todo el mundo es un ejemplo de su forma de vida y una inspiración para todos, como hemos podido apreciar durante los últimos años, en los que hemos tenido la oportunidad de visitar a muchos de vosotros en todo el mundo.
Que tengan un maravilloso resto de la semana y un buen sábado, hermanos. Acérquense más a Dios, permanezcan cerca de él y oren siempre unos por otros y para que se haga su voluntad.
Nuestros pensamientos, oraciones y amor están con todos ustedes, en todo el mundo.
Continuando en el servicio de Cristo,

Rich Shabi- presidente Iglesia de Dios Unida, una Asociación Internacional